viernes, 8 de febrero de 2013

¡Pasó la tempestad!

No hay ningún título que se adapte mejor a lo que quiero expresar en esta entrada. Han sido muchísimos meses desde la última vez que escribí por aquí, pero tengo que decir que han sido meses muy duros. Una vez pasada toda la tempestad, comencemos...

La carrera acabó, así, casi sin darnos cuenta. Sexto voló y creo que en ello tiene mucho que ver el hecho de que haya sido el curso que más he disfrutado de todos los vividos en la carrera. Flotaba en el ambiente la unión de todos, las ganas, la ilusión, los miedos...y eso hacía que quisiéramos exprimir hasta el último instante  con nuestros compañeros, a muchos de los cuales, no volveríamos a ver más (desde aquí aprovecho para recomendar a los que ahora están pasando por ello que DISFRUTÉIS muchísimo vuestro último curso; sacad sexto y ante todo, nada de AGOBIARSE por el MIR antes de tiempo, todo llega en esta vida y los agobios vendrán, pero que lleguen a su debido tiempo) ;)

Y así pasó el último examen de Febrero...y pasó el último examen de la carrera...y nos enteramos de la última nota que quedaba por saber (si, esa que salió 5 meses después de hacer el examen y que nos tenía a todos con el alma en vilo). Y llegaron las graduaciones, en plural :) Pero lo importante: se acercaba el momento de empezar lo serio, la plena preparación MIR. ¡Y tanto que llegó!

Tengo que decir que los meses, aunque parezca mentira, han pasado volando. Quizás una no es consciente mientras está pasando por ello, cuando todos los días son iguales, y cuando digo iguales, son exactamente iguales. Levantarse por la mañana, ver el planning del día y hala, 8 o 9 horas por delante... Por un lado diré que no me ha parecido tan tan duro como me pensaba, supongo que una se acaba acostumbrando a la rutina y si piensas que tus amigos y tu pareja están haciendo lo mismo que tu, los días van pasando, las semanas van pasando y los meses...se marchan.

El último mes ha sido el peor con diferencia. Ha sido un mes agotador, interminable. Ves el examen cerca y por un lado quieres hacerlo ya, pero por otro piensas: ¡pero si no me sé nada, necesito 3 meses más! Aunque creo que por muchos más meses que se le echarán encima, la cosa cambiaría poco; el trabajo duro ya estaba hecho.

Pero ya ha pasado todo y estoy muuuuy feliz. Aunque el examen fue de los peores de mi vida, no por resultados, sino por sensación, ahora que ya conozco un resultado aproximado estoy muy contenta. Solo queda esperar un poquito de suerte para poder elegir lo que me guste donde quiero y...el cuento habrá tenido final feliz :)

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